La Compañía Desafora2, con dirección de Víctor Velasco y sobre texto de Beatriz Bergamín, llegó para bajarle el telón a la programación teatral de Ellas Crean, un festival al que ya sólo le queda música por delante. Presentaba la obra “No hay papel” en la que se plantea una cruda reflexión sobre los difíciles tiempos que atraviesa la cultura y, en general, la vida misma, por la falta de trabajo y las consecuencias de esa lacra que es el paro. Sobre la falta de esperanza, si se explica a mayores.

Sobre la madera del escenario del Teatro Conde Duque cientos de papeles de periódicos, con anuncios de empleo que nunca tienen respuesta positiva. Las protagonistas son dos hermanas, Julia (Ángeles Martín) es o era una escritora; Clara (Beatriz Bergamín) es o era una periodista especializada en conflictos bélicos. Ambas defienden su presente con palabras, pero en un momento en el que precisamente no hay palabras, o las que hay no les pertenecen. Todo ello les conduce a un terreno de nadie, donde se sienten desubicadas, sin palabras, sin papel en el mundo.

Las dos protagonistas nos cuentan, a través de su historia, la nuestra propia, la falta de sentido común y justicia en una sociedad que ha perdido los valores, pero en el que ellas no cejan en su empeño inherente de ser fieles a sí mismas, a su dignidad. Una obra que nos dice mucho y muy de cerca.